Me despierto con el sol y las palabras de Bartolomé Ferrando: “El lenguaje de la performance está todavía por depurar, por establecerse y construirse”.  Hoy vamos a hacer pedagogía: en lugar de hablar de "improvisación", pensaremos en estructuras abiertas que generan relaciones inusuales, acciones donde la lógica de los elementos no existe.

Laura Corcuera

Seiji Shimoda (Nagano, 1953), referente japonés del arte de acción de los años 70 y director del NIPAF (Festival de Arte de Acción Internacional Nippon), impartió un taller de performance en marzo y abril de 2017 en el Teatro Musical de Valencia

Seiji Shimoda (Nagano, 1953), referente japonés del arte de acción de los años 70 y director del NIPAF (Festival de Arte de Acción Internacional Nippon), impartió un taller de performance en marzo y abril de 2017 en el Teatro Musical de Valencia.

El profesor dijo exactamente esto: “El tema es tan amplio que se deberían ir integrando factores y modelos de hacer que den lugar a un modo de articular una estructura. Yo soy defensor de la idea de estructura en performance. Que no se hable de improvisación performática, sino de una estructura muy abierta donde la lógica de los elementos no exista. Que el absurdo sea el engranaje de todo el discurso. Donde la narración no exista. Donde no se vehicule una historia concreta, sino que se produzca un retículo capaz de llegar al otro por diferentes vías. Abandonar la canalización de una idea para, sin dejarla de lado, provocar una especie de redes que abran la acción a diferentes lecturas. Esto es difícil. ¿Cómo hacerlo?”

Ferrando insiste en que una clave es la idea del fragmento: “En la clase trabajamos desde el primer día con la creación de sintagmas y relaciones inusuales que son fragmentos”. Inspirado en Robert Filliou y su Gong Show, el profesor invita a construir otras formas absurdas de acción con un sólo elemento “para evitar la dispersión y exigir más mentalmente”.

Con ese objeto se crean ideas de acciones. El grupo escoge las que consideran más interesantes y luego las lleva a cabo. Cada persona las desarrolla sola en busca de relaciones inusuales con el objeto. “Esta pequeña práctica sería la creación de un fragmento que decide el grupo. Trabajamos la relación entre interés y capacidad creativa. Preparamos 20 gongs que luego hacemos en la calle. Ese conjunto de propuestas elegidas por el grupo es una guía propia. Esto sería el germen para el desarrollo de una acción. No se trataría de retomar el sintagma como tal, sino que ese sintagma sirviera para estimular la imaginación y construir algo propio”. Accionar conforme a una inquietud, un deseo, un problema, una experiencia, una vivencia... La idea base de la performance es algo propio que sirve para cimentar los fragmentos de la acción. “El potencial es brutal. El problema es que cuaje”, insiste el profesor. Vuelvo a recordar la hipótesis matemática que escribí ayer:

formula

Bartolomé Ferrando y yo quedamos en el Taller de Fuencisla Francés. Vamos a ver Altres, una performance de Lorena Izquierdo y Josep María Balanyà, que ha venido de Bruselas. El profesor está con Truna, su compañero de experimentos sonoro-poéticos. Hay mucha gente. Y vino tinto. El profesor me presenta a Ulises “El Pistolo”, artista valenciano gótico-crrepi-neopunk y a la anfitriona Fuencisla Francés, una escultora muy menuda que hace intervenciones de gran tamaño. Me reencuentro con el performer Mario Montoya. El profesor me habla de una artista de acción valenciana ausente esa noche: la performer Nika López, cuyo trabajo plantea un juego de equilibrios entre el cuerpo humano y la naturaleza.

Montoya, Izquierdo, Balanyà y yo nos vamos a cenar a La Caracola, restaurante gestionado por un grupo de amables lesbianas en el barrio del Carmen. Mario Montoya y Lorena Izquierdo (ex-alumnos de Bartolomé Ferrando) coordinan el Ciclo Internacional de Talleres de Performance en el Teatre El Musical (TEM), en colaboración con el ayuntamiento de Valencia. En 2017 han invitado a dar talleres accesibles de pasta a Monika Günther y Seiji Shimoda, entre otrxs pedagogxs del arte de acción.

Durante la velada, me entero de que el Kasal Popular de Valencia albergó performances en los 90. Oigo hablar por primera vez del colectivo artístico El Purgatori, de Ángeles Marco y de David Pérez. Hay más nombres que no logro apuntar.

Entre 1989 y 1994 un grupo de estudiantes (entre ellos, Nelo Vilar) montó con Bartolomé Ferrando un grupo llamado A.N.C.A. (Asociació de Nous Comportaments Artistics). Esta memoria fue recogida por Fernando José Baena en su tesis doctoral Arte en acción en España. Análisis y tipologías (1991-2011).

Datos, testimonios y acontecimientos que dan un trazado de las prácticas artísticas experimentales en la España de la Transacción. “Los años 80, desde el punto de vista histórico, no están concluidos”, afirma Karin Ohlenschläger, investigadora cultural, directora artística de la LABoral de Gijón y comisaria de la exposición Espacio P. 1981-1997 (en el CA2M de Móstoles hasta el 8 de octubre de 2017).

Me queda un día para regresar a Madrid y el Espacio P reaparece en una noche loca de Valencia. No es una discoteca. Es la plaza de nuevo, electrónica en directo y un móvil con el que ver acciones de hace treinta y tantos años: Presencias (ARcO’82. Grupo Corps. Madrid, 1982), Necropsia colectiva. Paloma Unzeta. Espacio P. Madrid, 1983), Emisión II (ARcO’84. Grupo Corps: Lourdes Durán, Pedro Garhel y Paloma Unzeta, Madrid, 1984) o Vionta (Camen Marchán. I Festival de Performance. Espacio P. Madrid, 1991).

Emisión II. ARCO’84. Grupo Corps (Lourdes Durán, Pedro Garhel y Paloma Unzeta). Espaco P, Madrid, 1984. Foto: Hans Löhr.

Emisión II. ARCO’84. Grupo Corps (Lourdes Durán, Pedro Garhel y Paloma Unzeta). Espaco P, Madrid, 1984. Foto: Hans Löhr.

Hagamos breve memoria madrileña. El primer Festival Internacional de Arte Raro y Performance (FIARP) se haría en 1991 en el Espacio P (1981-1997), local autogestionado en el centro de la ciudad que impulsó el canario Pedro Garhel (1952-2005), con el apoyo de mucha gente como Rosa Galindo (Depósito Dental). Fue el primer espacio centrado en la performance y acogió a cientos de artistas y grupos internacionales (Valie Export, entre otros) vinculados al arte experimental, a fluxus, el punk, la electrónica, y, en el camino de pensar las relaciones entre el arte y la tecnología, al incipiente movimiento hacker. Una movida madrileña de la que sólo ahora se empieza a hablar.

Espacio P organizó acciones pioneras de Realidad Virtual y el I Encuentro Iberhack dentro del Festival Ars Futura de Madrid. Fue un espacio vinculado al asamblearismo y al movimiento social de okupación, que terminó por combinar la filosofía DIY (Do it Yourself) con la producción de materiales para instituciones culturales como la Documenta 8 de Kassel, el Festival de Otoño o el Instituto Goethe de Madrid.

Entre 1991 y 1993, Nieves Correa y Tomás Ruiz Rivas montan tres ediciones del FIARP. La segunda edición se haría en el Centro Social Okupado Autogestionado Minuesa; la tercera en el Ojo Atómico. Desde 1996, el espacio-encuentro del arte de acción en Madrid se llama Accion!Mad.

Hagamos más viajes en esta noche loca de Valencia, ciudad de corredores y amantes del culto al cuerpo. A finales de los 80 Joan Casellas, Juan Ugalde y Patricia Gadea viven en Nueva York. Crean una revista de fotocopias con tres nombres diferentes: Anyway, Chuc y Estrujen Bank. A su regreso a Barcelona en el convulso 1992, Ugalde y Gadea montan la galería Estrujenbank. Y Casellas crea la plataforma y revista postal AIRE espacio de pensamiento artístico, germen del Archivo AIRE de Performance.

A comienzos de los 90 se hacen festivales y se abren espacios en las principales ciudades del Estado español. En Zaragoza Pedro Bericat ya cacharrea con el ruidismo y el Grupo Pértiga monta en 1990 las primeras jornadas de Performance y Arte de Acción.

En 1994 Granada acoge las segundas jornadas de performance y nuevas formas de creación. Mientras, en Vitoria-Gasteiz tiene lugar el I Encuentro de colectivos independientes para la gestión y difusión del arte actual (11 y 12 de noviembre, Transforma) donde se creará la Red Arte. Beatriz Silva se animó a describirlo. En 1995, el encuentro se replica en Murcia. Ese mismo año en Valencia se hace el Festival de Performance en las fábricas de fosfatos Cros de Valencia. En 1996 se vuelve a repetir el encuentro de la RedArte en Vitoria, donde a pesar de las diferencias entre personas y proyectos prevalece la idea común de una red de arte experimental.

“En los 90 se abrían espacios okupados autogestionados y se usaba la calle, pero a veces esto molestaba a quienes tenían un espacio de alquiler –recuerda Joan Casellas– les molestaba que estuviéramos en igualdad de condiciones cuando ellxs pagaban el alquiler de su galería”, en referencia a las actividades que Casellas hacía junto a Carles Hac Mor, Óscar Abril Ascaso, Nieves Correa, Nelo Vilar y Nel Amaro, entre otrxs. Casellas recuerda cómo entonces “José Luis Brea (y Richard Serra) era dios”. Brea, filósofo y teórico de las “auras frías” llegaba a los encuentros con su revista de arte “y conseguía suscribir a todo el mundo”. Mucha pollavieja, vaya.

En 1997 la RedArte realizaría su último encuentro en Barcelona antes de romperse. Según Casellas, la RedArte fue “un desafío para conciliar grandes diferencias en procedimientos artísticos y formatos”. El proyecto se arrastraría tres años más.

No me puedo fiar de todas las notas que he tomado esta noche. No logro localizar después el Espacio Caracol que tengo apuntado en el cuaderno, supuestamente una galería no comercial dirigida no-sé-dónde-ni-cuándo por una artista cuyo nombre no recuerdo y por Nekane Aramburu, actual directora de Es Baluard en Palma de Mallorca e impulsora de los Archivos Colectivos, una guía de espacios sociales autónomos vinculados a prácticas artísticas y creados en el Estado español entre 1980 y 2010, acompañada de 43 entrevistas a artistas de acción.

Termino la noche valenciana con las chicas de la Caracola en el barrio del Carmen. Recordamos a las compañeras de la Eskalera Karakola de Madrid. Va de caracolas. Y se me hace de día ordenando apuntes o de parranda. Queda sólo un día para terminar la Ruta de la Performance. Valencia se expande como una pastilla.

  • 'Duelos y quebrantos', acción de Nieves Correa y Abel Loureda, Centro de Arte Dados Negros, Ciudad Real, 2017. “El trabajo de una pareja de artistas, que además es pareja vital, lleva implícito que nuestra vida en común esté presente en nuestras piezas”, Correa y Loureda. Foto: Yolanda Pérez Herreras.

    Acción Duelos y quebrantos de Nieves Correa y Abel Loureda, Centro de Arte Dados Negros, Ciudad Real, 2017. «El trabajo de una pareja de artistas, que además es pareja vital, lleva implícito que nuestra vida en común esté presente en nuestras piezas», Correa y Loureda. Foto: Yolanda Pérez Herreras.

  • "El objeto cotidiano, esconde en su aparente insignificancia la capacidad de transformar el mundo conocido", Mario Montoya. Foto: Diàleg Obert.

    «El objeto cotidiano, esconde en su aparente insignificancia la capacidad de transformar el mundo conocido», Mario Montoya. Foto: Diàleg Obert.

  • "Cojo carretera y manta directa a Madrid. Hace mucho frío. Puede que nieve. Pienso que la performance es una forma de deambular en la vida", LCGG. Foto: FreeImages.

    «Cojo carretera y manta directa a Madrid. Hace mucho frío. Puede que nieve. Pienso que la performance es una forma de deambular en la vida», LCGG. Foto: FreeImages.

  • El profesor Bartolomé Ferrando y un estudiante de performance, Diàleg Obert, Teatre El_Musical de Valencia, 2017.

    El profesor Bartolomé Ferrando y un estudiante de performance, Diàleg Obert, Teatre El_Musical de Valencia, 2017.

  • Portada de DOC(K)S, revista de poesía experimental, num50, monográfico Espagne, Paris, 1982.

    Portada de DOC(K)S, revista de poesía experimental, num50, monográfico Espagne, Paris, 1982.

  • Acercamiento a Michelangelo Pistoletto. Espacio P. Madrid, 1983. Foto: AEP.

    Acercamiento a Michelangelo Pistoletto. Espacio P. Madrid, 1983. Foto: AEP.

  • Tarjeta utilizada para la difusión de las actividades de Espacio P, Madrid, 1987.

    Tarjeta utilizada para la difusión de las actividades de Espacio P, Madrid, 1987.

  • 'Vionta'. Acción de Camen Marchán. I Festival de Performance. Espacio P. Madrid, 1991. Foto: Fernando Suárez Cabeza.

    ‘Vionta’. Acción de Camen Marchán. I Festival de Performance. Espacio P. Madrid, 1991. Foto: Fernando Suárez Cabeza.

  • Bartolomé Ferrando. Poema sonoro, Nagano, Japón, 2014. Foto: Seiji Shimoda.

    Bartolomé Ferrando. Poema sonoro, Nagano, Japón, 2014. Foto: Seiji Shimoda.

  • Taller de Fuencisla Francés, Valencia. Imagen de 'Altres', peformance de Lorena Izquierdo y Josep María Balanyà, 17 de enero de 2017 / Laura Corcuera.

    Taller de Fuencisla Francés, Valencia. Imagen de ‘Altres’, peformance de Lorena Izquierdo y Josep María Balanyà, 17 de enero de 2017 / Laura Corcuera.

  • El performer Isidoro Valcárcel Medina, cartel del Laboratorio de Acción, Festival Abierto en Acción, Murcia, 2017.

    El performer Isidoro Valcárcel Medina, cartel del Laboratorio de Acción, Festival Abierto en Acción, Murcia, 2017.

  • Mónica Günther, performer y pedagoga alemana de referencia en el arte de acción, ha sido maestra de muchxs performers por todo el planeta. En diciembre de 2016 impartió un taller en el Teatro Musical de Valencia, dentro del programa Diàleg Obert. "Respecto a su práctica como enseñante, he de decir que ya traje al dúo Günther-Schill hace más de diez años a la Universidad Politécnica de Valencia, provocando el interés de todos y cada uno de los estudiantes matriculados", Bartolomé Ferrando.

    Mónica Günther, performer y pedagoga alemana de referencia en el arte de acción, ha sido maestra de muchxs performers por todo el planeta. En diciembre de 2016 impartió un taller en el Teatro Musical de Valencia, dentro del programa Diàleg Obert. «Respecto a su práctica como enseñante, he de decir que ya traje al dúo Günther-Schill hace más de diez años a la Universidad Politécnica de Valencia, provocando el interés de todos y cada uno de los estudiantes matriculados», Bartolomé Ferrando.

  • 'Duelos y quebrantos', acción de Nieves Correa y Abel Loureda, Centro de Arte Dados Negros, Ciudad Real, 2017. “El trabajo de una pareja de artistas, que además es pareja vital, lleva implícito que nuestra vida en común esté presente en nuestras piezas”, Correa y Loureda. Foto: Yolanda Pérez Herreras.

    ‘Duelos y quebrantos’, acción de Nieves Correa y Abel Loureda, Centro de Arte Dados Negros, Ciudad Real, 2017. “El trabajo de una pareja de artistas, que además es pareja vital, lleva implícito que nuestra vida en común esté presente en nuestras piezas”, Correa y Loureda. Foto: Yolanda Pérez Herreras.

  • Robert Filliou, promotor de los Gong Shows, hablaba de creatividad (no de arte) y se consideraba a sí mismo un creador de anti-objetos. Su participación en la resistencia francesa, estudios de economía política y un acercamiento al budismo se materializaron en la elaboración de su Principio de Economía Poética. Las propuestas de desinstitucionalización del arte tomaron forma con su Galérie Légitime, galería itinerante contenida en una gorra en la que mostraba obras suyas y de colegas. En la imagen, págs 88 y 89 del catálogo 'Robert Filliou. Genio sin talento / Robert Filliou. Génie sans talent', MACBA, 2003.

    Robert Filliou, promotor de los Gong Shows, hablaba de creatividad (no de arte) y se consideraba a sí mismo un creador de anti-objetos. Su participación en la resistencia francesa, estudios de economía política y un acercamiento al budismo se materializaron en la elaboración de su Principio de Economía Poética. Las propuestas de desinstitucionalización del arte tomaron forma con su Galérie Légitime, galería itinerante contenida en una gorra en la que mostraba obras suyas y de colegas. En la imagen, págs 88 y 89 del catálogo ‘Robert Filliou. Genio sin talento / Robert Filliou. Génie sans talent’, MACBA, 2003.